Elegir entre una piscina de cloro o de sal
El tratamiento del agua es importante para que esta se mantenga limpia y cristalina. ¿Pero cómo elegir entre una piscina de sal o una de cloro? ¿Cuáles son sus ventajas y sus inconvenientes? Le explicamos todo lo que necesita saber para elegir el tratamiento que más le conviene.
¿En qué se diferencian una piscina de sal y una de cloro?
El cloro se presenta en forma líquida, gaseosa o en pastillas, que se añaden al agua de la piscina. Este producto tiene una acción desinfectante: evita el desarrollo de algas y elimina las bacterias.
En una piscina de sal, es la sal quien, por medio de la electrolisis, fabrica el cloro que servirá para mantener limpia el agua. La corriente eléctrica de la filtración en una piscina de sal crea cloro natural, diferente de las soluciones químicas que se compran en tiendas.
La piscina de agua salada: ventajas e inconvenientes
El tratamiento de una piscina de agua con sal tiene sus propias particularidades, siendo la más destacada el uso de un clorador salino. Se suele elegir este tipo de tratamiento por su carácter ecológico y porque es inodoro.
Las ventajas de una piscina de sal
- El coste del mantenimiento: una vez en marcha, el tratamiento puede durar años sin necesidad de añadir más productos.
- El mantenimiento: el mantenimiento es más sencillo y la piscina puede funcionar todo el año sin necesidad de corregir la cantidad de sal.
- El aspecto ecológico: sin productos químicos, es un tratamiento que no perjudica al medio ambiente.
- La seguridad: como no se utilizan productos químicos, no hay necesidad de almacenar en casa productos peligrosos.
- Un baño más agradable: el tratamiento de una piscina de sal es inodoro, menos irritante para los ojos o la piel y no suele ser fuente de alergias.
Los inconvenientes de una piscina que utiliza sal
- El coste de la instalación: si bien el coste del mantenimiento de una piscina de sal es inferior, su instalación puede necesitar cierta inversión. Hay que comprar un clorador salino y recurrir a un profesional. El coste de la instalación de una piscina de sal puede alcanzar los 2000 €.
- El equilibrio del agua: una piscina que utiliza sal tiene un equilibrio más frágil. Por lo tanto, es especialmente importante vigilar de cerca el pH y ajustarlo. Junto con el coste de la instalación es el principal inconveniente de un tratamiento con sal para una piscina.
- La fragilidad: los electrodos son bastante frágiles y puede ser necesario cambiarlos regularmente.
- La corrosión: la sal es un producto corrosivo, así que hay que lavar bien el clorador salino regularmente para que no se estropee.
- La temperatura del agua: idealmente no debe bajar de 16° C. A temperaturas inferiores, el agua conduce peor la electricidad y el clorador salino será menos eficaz, además sus electrodos podrán estropearse.
La piscina de cloro: ventajas e inconvenientes
Con su instalación fácil y su eficacia, es el método más habitual para desinfectar el agua.
Las ventajas de una piscina de cloro
- La eficacia: la desinfección es muy eficaz. El cloro elimina rápidamente tanto las bacterias como las algas o los mohos.
- La facilidad: es fácil de usar y rápido.
- El coste: no requiere ninguna inversión inicial. Una piscina de cloro tiene un consumo de electricidad más reducido.
- La temperatura: es igual de eficaz en agua fría.
Los inconvenientes de una piscina de cloro
- Las irritaciones: puede irritar la nariz, los ojos y la piel. También puede decolorar los trajes de baño, las toallas y el material.
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El mantenimiento anual: hay que comprar producto regularmente y tener siempre producto en casa para ajustar el tratamiento del agua.
Cuando hace más calor, a veces hay que usar más producto, y esto aumenta el coste de mantenimiento.
- El olor: el cloro tiene un olor particular que puede molestar a algunas personas (¡y gustar a otras!).
- Su carácter nocivo: es un producto peligroso que se debe almacenar fuera del alcance de los niños y de los animales.
- No es ecológico: el cloro es un producto químico que puede ser nocivo para el entorno natural.
Piscina de sal o de cloro: ¿qué hay del mantenimiento?
Independientemente del tratamiento elegido, será necesario un mantenimiento regular del agua de su piscina. Con una piscina de sal, no hace falta añadir más sal a menudo. Sin embargo, hay que limpiar regularmente los electrodos del clorador salino y comprobar el pH. También necesitará material para limpiar el agua y el vaso (red recogehojas, aspirador, etc.), pero ningún tratamiento químico adicional.
Con una piscina de cloro, también tendrá que limpiar el vaso de la piscina regularmente. También deberá comprobar la cantidad de cloro en el agua y aumentarla si es insuficiente, y lo mismo se aplica a la tasa de pH. Manipule con prudencia el producto químico, y protéjase con guantes y mascarilla.
En todos los casos, no olvide instalar un cobertor de piscina para protegerla y facilitar el mantenimiento.
Convertir una piscina de cloro en una piscina de sal
Tiene una piscina de cloro, pero le gustaría cambiar a un tratamiento con sal. El coste de pasar de una piscina de cloro a una de sal puede ser considerable, ya que tendrá que comprar un clorador salino, contratar a un profesional y comprar la sal.
Antes que nada, compruebe que su instalación sea compatible. ¿Dispone de suficiente espacio en su local técnico para instalar un clorador salino? ¿Es compatible su sistema de filtración, sin piezas de acero inoxidable que la sal podría atacar?
Si su piscina es compatible con un tratamiento de sal, lo primero será eliminar el cloro ya presente en el agua, deteniendo el tratamiento, pero sin detener la filtración. A continuación, habrá que purgar el sistema de filtración e instalar el clorador salino.
El último paso de esta transformación será calcular la cantidad de sal necesaria y añadirla al clorador salino. No olvide comprobar el pH regularmente para mantenerlo entre 7,2 y 7,4.
Piscina de sal o de cloro: ¿cuál es el mejor tratamiento?
No se puede decir que un tratamiento sea mejor que otro. Sin duda, la sal es más ecológica y menos irritante, pero el cloro es fácil de empezar a usar y requiere menos inversión inicial.
Para elegir cuál será el tratamiento óptimo para usted, tendrá que tener en cuenta:
- el gasto que puede asumir para el tratamiento de su piscina, tanto a lo largo del año como para la instalación del material necesario;
- las ventajas y los inconvenientes de cada método;
- el tipo de mantenimiento que le parece más o menos exigente;
- por último, la región en que vive y las temperaturas habituales también pueden incidir en su elección.
Cloro o sal, cada tratamiento tiene sus ventajas y sus inconvenientes. La elección acertada se hará dependiendo de su equipamiento, asegurándose de que sea compatible con el tratamiento seleccionado, y de sus necesidades. Hablar con otros propietarios de piscinas y escuchar su opinión sobre el cloro y la sal con sistema de electrolisis, también le ayudará a tomar la decisión correcta.